lunes, 20 de febrero de 2017

Etapas para impulsarnos hacia nuestras metas.


Las etapas que hay que cubrir para impulsarnos hacia nuestras metas son: 

1. Deseo: deseo ardiente por conseguir logros. Tiene que ser un deseo personal, no de otros. 

2. La creencia: tenemos que creer que nuestra meta es posible. Es mejor establecer metas pequeñas para ir aumentándolas progresivamente. 

3. Escribir la meta: escribirlas de forma clara y concreta. La mayoría de las personas de éxito han escrito sus metas. Algunos no escriben sus metas por miedo al fracaso, si no las escriben nadie podrá decirles que no las lograron. 

4. Causas de las metas: por qué deseamos una determinada meta. Cuantas más razones haya para conseguir una meta, mejor, más intensificará su deseo. 

5. Analizar la posición: analizar el punto de partida. Sentarse y reflexionar cuáles son nuestros puntos fuertes y débiles, cuál es nuestra situación aquí y ahora, de la manera más realista posible. Tenemos que actuar como si fuésemos auténticos estrategas. 

6. Establecer una fecha tope: lo mejor es tener una serie de metas consecuentes y repartidas en el tiempo, de forma que tengamos un programa que llevar a cabo. También de forma paralela se puede establecer un programa de premios que refuercen la consecución de las metas aumentando las probabilidades de éxito. 

7. Identificar los obstáculos: los obstáculos o dificultades sirven para poner a prueba nuestras capacidades, hay que verlos como un reto que tenemos que superar. Siempre hay dificultades y están ahí para enseñarnos, para hacernos más fuertes. Si no hay obstáculos no es una meta. Sin dificultades no sentiríamos la alegría de haber conseguido algo que ha costado esfuerzo. Es importante identificar las dificultades más importantes para prestarles mayor atención. 

8. Identificar el conocimiento que vamos a necesitar: hay que identificar cuál es el tipo de conocimientos que más vamos a necesitar para conseguir la meta. Es necesario absorber conocimientos leyendo, investigando, preguntando a otros, observando, etc. Es importante que al tiempo que se adquieren conocimientos se inicien acciones que acerquen a la meta. No olvidemos que la acción, la experimentación es una gran fuente de conocimiento. Los conocimientos sin acción no llevan a ninguna parte, estancan en un plano teórico. Es importante preguntar a los demás (expertos o noveles) sobre cómo conseguir las cosas, ser humilde a la hora de preguntar y saber escuchar prestando la máxima atención. 

9. Preguntarse: ¿a quién necesito para conseguir mis metas?. Siempre hay personas a las que necesitamos para lograr nuestras metas. Su ayuda y colaboración se consigue dando más de lo que se ofrece a cambio. Tenemos que dar más de lo que se nos pide. La persona que tiene esta mentalidad llega lejos porque está motivada a dar un verdadero servicio a los demás y no se atasca en las formalidades. Se antepone lo humano a lo burocrático y eso la gente lo valora. Todo lo que ofrecemos de más nos acabará volviendo de alguna manera. Además las grandes satisfacciones en la vida se derivarán de servir a los otros (motivación trascendente). Cuanto más trabaje uno para aumentar el valor de su aportación, más feliz será y mayores serán sus recompensas. 

10. Elaborar un plan: diseñar un plan de acción y revisarlo una y otra vez. Organizar las actividades que hay que realizar para cumplir las metas por orden de prioridades y temporalizarlas. 

11. Visualizar los resultados: crear una imagen mental clara de los resultados que se desean. La visualización es una poderosa técnica que sirve para realizar importantes cambios en la vida. Supone relajar el cuerpo, despejar las distracciones de la mente e imaginar escenas positivas. 

12. Reforzar el plan con determinación y persistencia: la perseverancia adquiere valor cuando uno está dispuesto a continuar a pesar de los obstáculos, las dificultades, las caídas, los fracasos, las pérdidas, etc. La perseverancia es la medida de fe en uno mismo y cada vez que uno persevera frente a la adversidad su fe en sí mismo aumenta, hasta que llega el momento en que nada puede pararle en el camino hacia su propio desarrollo como ser humano. 

Escribe tus metas y Ponte en Marcha!

lunes, 13 de febrero de 2017

Claves para el establecimiento de metas.


Claves para el establecimiento de metas. 

1. El cambio: el cambio es necesario y forma parte del progreso, la vida no puede mejorar sin cambio. El cambio asusta a no ser que vaya dirigido hacia unas metas. Nadie teme al cambio si este va en la dirección que se desea. 

2. La zona de excelencia: todo ser humano tiene una zona de excelencia, una zona donde posee aptitudes superiores a lo normal, está más capacitado. Para encontrar nuestra zona de excelencia hemos de fijarnos en las cosas que retienen nuestra atención, las que nos interesan y atraen, y las que nos absorben el tiempo sin darnos cuenta de ello. 

3. Las oportunidades ocultas: todo lo que andamos buscando (oportunidades) está bajo nuestros pies. Lo único que tenemos que hacer es explotar lo que ya tenemos. Las oportunidades siempre vienen camufladas en forma de trabajo duro, y se necesita trabajo y esfuerzo para desarrollarlas. Lo mejor es buscar las aptitudes en la zona de excelencia bajo nuestros pies donde tenemos la oportunidad de desarrollarnos como persona. 

4. La importancia del equilibrio en la vida: el verdadero éxito en la vida significa haber conseguido un equilibrio aceptable entre los distintos aspectos de nuestra vida. Se han de tener unas metas equilibradas que han de orientarse en tres direcciones: 
  • Relaciones con los demás: este tipo de metas significan el porqué de nuestra vida. Pensar que otras metas son más importantes dejando éstas de lado es un error que se paga muy caro. Estas metas son más fáciles de conseguir que el resto. Muchas veces no se trata de buscar cosas nuevas sino de cuidar y mejorar las relaciones que uno ya tiene. Un punto clave para ampliar nuestras relaciones es mejorar las que ya tenemos. 
  • Profesionales: el aspecto profesional es muy importante porque dedicamos mucho tiempo de nuestra vida a ello. Cuanto antes comencemos a realizar actividades profesionales que nos gusten, antes disfrutaremos de la vida. Estas metas exigirán mucho tiempo y esfuerzo. Hará falta mucha energía para mantener la actividad, por lo que las metas han de ser coherentes con los valores e ideales que uno tiene en la vida. Algo muy importante en el ámbito profesional es el afán de superación, la energía que ha movido el mundo y que ha hecho que el hombre llegara a realizar cosas impresionantes. 
  • Personales: metas relacionadas con uno mismo. Las metas personales sirven para superarse a uno mismo y se deben plantear como un proceso de mejora, no como una competición con los demás. Cada uno tiene su ritmo. 
Para poder cambiar las cosas y orientarse hacia aquellas cosas que más nos gusten debemos diseñar nuestro proyecto de vida definiendo metas en las tres direcciones citadas anteriormente. Ponte en Marcha!
 

martes, 7 de febrero de 2017

El proceso de trabajar con metas.


Cuando uno quiere emprender, cambiar su vida, quiere superarse y vivir de una forma más plena, necesita plantearse unas metas. Las metas son necesarias porque sin metas uno acaba navegando a la deriva. 

Las metas se fundamentan en unos valores humanos sólidos. Lo primero en la vida de una persona son sus valores, luego sus metas. Las acciones son el resultado de los valores. 

La capacidad de elaborar metas y de elaborar planes de acción para la consecución de esas metas, es la capacidad principal para el éxito. 

Cada uno de nosotros funciona mediante dos mecanismos: 

· Mecanismo de fracaso: tendencia humana a situarse en la zona cómoda, a evitar el esfuerzo. Queremos lo fácil, lo divertido, lo que nos hace disfrutar, lo hedonista. 

· Mecanismo de éxito: lo que nos hace superarnos y está impulsado por una meta. Cuando uno establece una meta, supera el mecanismo del fracaso, pone energía positiva que refuerza el deseo, le dota de persistencia y le hace avanzar hacia su destino. 

La forma de escapar de la zona cómoda es marcarse metas progresivamente superiores. El superarse hace crecer, mantiene vivo y ayuda a tener éxitos. 

Como humanos necesitamos dar sentido a nuestra vida, por eso necesitamos una dirección. 

A veces no nos fijamos metas por los siguientes motivos: 
· No nos damos cuenta de la importancia de las metas. 
· No sabemos plantear metas. 
· El miedo al rechazo. 

La clave para superar esto es mantener en secreto las metas. Muchas personas se sienten amenazadas ante las personas que sí tienen metas, les preocupan, les hacen sentirse inferiores. No comentar las metas a cualquiera, sólo a personas que también tengan metas y que intenten superarse. Para muchas personas es más cómodo no tener metas que someterse a la crítica o al rechazo. 

· El miedo al fracaso. Es la primera razón por la que fracasamos. El «no puedo». El miedo al fracaso inmoviliza, pero es imposible llegar al éxito sin fracasar. 

Por qué si quieres puedes, fíjate tus metas y Ponte en Marcha!