miércoles, 24 de enero de 2018

Emprender es como ser bombero.


Emprender es como ser bombero. Es vocacional, ya que el bombero disfruta con la experiencia de riesgo y la incertidumbre. 

Ambos deben pasar la prueba de fuego: Disfrutar con la incertidumbre; el deseo de moverse en un entorno incierto, asumiendo la responsabilidad de la ausencia de seguridad y rutinas preestablecidas. 

Por ello, “el emprendedor/empresario es la persona que se mueve en un mundo incierto para que los que trabajan para él crean que ese mundo es seguro”

Al igual que los bomberos, esos héroes anónimos la emprendeduría está llena de héroes anónimos que todos los días hacen su trabajo sin salir en portadas ni en la prensa de color salmón. 

Apagar incendios puede sonar muy sencillo, pero los bomberos requieren de un entrenamiento complejo, muchas veces ellos corren grandes riesgos y deben ser capaces de organizarse rápidamente y trabajar en equipo. Entre una emergencia y otra, ellos deben limpiar y reparar su equipo, practicar todas sus rutinas, hacer entrenamiento físico y realizar inspecciones en sitios de riesgo. 

La labor del bombero combina saber trabajar en equipo y poseer capacidad de entrega y sacrificio, en definitiva una buena preparación psicológica, con unas cualidades físicas importantes. 

Si los bomberos salvan gente, los emprendedores salvan las economías de los países, trabajando para generar riqueza y empleo, a través de su esfuerzo y cooperación con otros emprendedores. 

Emprender es un acto emocional y por ello “creo que emprender no es cuestión de conocimientos sino de carácter, y en estos casos, como antiguamente se decía, <A quién Dios no da, Salamanca no presta>” 

Un emprendedor es un tipo con afán de bombero pero sin ideas de bombero. 

Ponte en Marcha! pero no actúes en la improvisación del apaga fuegos.

viernes, 19 de enero de 2018

Emprender es como hacer equilibrismo.


Emprender es como hacer equilibrismo. Sólo hay que preocuparse de dar el siguiente paso, porque si cada paso que das, lo das bien, al final llegarás a la meta. Pero si en lugar de pensar en el paso que estás dando estás pensando en otras cosas, es posible que te distraigas, y te vayas al suelo, y si esto ocurre, … ¡Paf se acabó! 

Ser emprendedor es un ejercicio de equilibrio, en el que hay que acostumbrase a vivir en la cuerda floja sin vacilación. 

El equilibrismo como la emprendeduría es arte o ciencia? Es indudable que hay un aprendizaje que viene con los años, lecciones que se convierten en principios generales, o ciencia, pero es indiscutible que cruzar un precipicio caminando sobre una soga es, en gran medida, un arte. 

Uno de los secretos del equilibrista es no parar. Si frena o duda, se arriesga el abismo. Pero tampoco conviene correr. Hoy, al emprender todos estamos corriendo con el gasto. Pero en las finanzas, correr es arriesgar la trampa del ‘offside’ financiero. El ritmo de la burbuja es insostenible y nos hace recordar que el emprender por ser una actividad de riesgo necesita de una red de seguridad.

Consejos para iniciarte en el equilibrismo que te resultarán útiles a la hora de emprender. 

1. Utiliza zapatillas planas. Lo primero que has de hacer para asegurar tu éxito en este deporte es conseguir unas zapatillas de suela plana que te ayuden a mantener la estabilidad. Ajustándotelas muy bien conseguirás controlar tus pies al 100% y evitar el desequilibrio. A la hora de emprender ándate con pies de plomos y ajusta tus gastos e ingresos a tú realidad. No por tener un grandioso plan de negocio los ingresos van a llegar. El papel lo aguanta y amortigua todo menos tú caída. 

2. Busca un lugar adecuado. El equilibrismo puede practicarse casi en cualquier parte, pero para dar tus primeros pasos lo mejor es comenzar en un terreno plano, especialmente si está cubierto de césped o arena, ya que amortiguará la caída en caso de que pierdas el equilibrio. Lo mismo para emprender, una cosa es arriesgar y otra no tener red de seguridad. 

3. Comienza con un pie. Para comenzar lo mejor es que intentes mantener el equilibrio apoyándote con un pie, escogiendo aquel con el que te sientas más cómoda. Cuando lo tengas más o menos controlado deberás pasar al otro para acostumbrarte. Una vez te sientas seguro, podrás comenzar con tus primeros pasos. Lo dicho a la hora de emprender pasito a pasito y sin prisas y con buen pie.

4. Paciencia. Sabemos que vas a querer aprender muy rápido, pero en este caso eso va a ser imposible. El equilibrismo como la emprendeduría es un deporte de mucha práctica y muchísima paciencia. Cuando comiences deberás tener siempre presente que la auténtica finalidad es relajarte y llegar a controlar cada uno de los movimientos de tu cuerpo, por lo que has de centrarte en disfrutar al máximo durante el proceso¡ Poco a poco alcanzarás tu meta. 

Ponte en Marcha! Pero no te tires al vacío y menos no te dejes que te empujen.